Según C. Gene Wilkes (1998)[1] en el modelo del liderazgo siervo de
Jesús se puede encontrar seis principios del liderazgo-siervo:
El
llamado. Los líderes
siervos se sienten llamados por Dios para servir a otros, sacrificando sus
propios intereses en bien del grupo. Este principio no se enseña por teoría
sino en la práctica de servir efectivamente, es por esa causa que el liderazgo
siervo no es considerado un estilo realista o compatible.
Seguir a Jesús. Los
líderes siervos siguen a Jesús, en vez de anhelar una posición (Marcos
10:32-40). Jesús enseñó que el servicio y sufrimiento por su causa viene antes
del reinado con él. Liderazgo no es lo mismo que posición.
El servicio. Los líderes
siervos desisten de sus derechos personales, para encontrar grandeza en el
servicio prestado a otros (Marcos 10:45). Siempre están en actitud de servir.
Ellos “agarran la toalla” del servicio como Jesús para satisfacer las
necesidades de otros (Juan 13: 4-11).
Ellos, como siervos de Jesús y de su iglesia no dan órdenes, por el
contrario ayudan capacitando, inspirando y delegando responsabilidades de
servicio según sus dones.
Fe y esperanza arriesgada.
Los líderes-siervos aceptan el riesgo de servir a otros, porque confían que
Dios está al control de sus vidas (Juan.13:3).
Visión. Los líderes siervos tienen la capacidad de
anticipar los acontecimientos futuros. Tienen la perspectiva correcta y son peritos en escoger las cosas
por encima de patrones culturales del ambiente social, anticipándose a lo que
puede suceder en el futuro. En tal sentido anticipan consecuencias y desarrollan
gran capacidad de previsión.
Humildad. Los líderes siervos se humillan y esperan que
Dios los exalte a su tiempo. (Lucas 14:7-11).
Integridad de corazón. Los
líderes siervos no hacen concesiones en su integridad.
Amor atrayente. Los
líderes siervos tienen un trato amable y bondadoso, multiplican sus seguidores
atrayéndolos por un amor capaz de sacrificarse por ellos (Juan.8:32).
Modelar su enseñanza. El
apóstol Pablo, un verdadero líder siervo, señaló: “Sed imitadores de mi como yo
de Jesucristo” (1 Tesalonicenses. 2.5–12). El líder siervo modela sus liderazgo
mediante la entrega de sí mismo por amor y luego trabajando arduamente para el
bienestar de los dirigidos.
Dr. Rubén Jaimes Zubieta
Universidad Peruana Unión
[1] C. Gene Wilkes, O Ultimo Degrau da Lideranca. Sao Paulo, Editora mundo Cristiano. 1998. Pg. 30. Se ha resumido las
características presentadas por Wilkes en el mismo orden que él las presenta.