lunes, 16 de enero de 2012

ENFOQUES TEÓRICOS DE LIDERAZGO



Gran parte de los estudios y publicaciones sobre el liderazgo se ocupan de la característica de los buenos líderes, pero tales enfoques resultan demasiado generales para el objetivo práctico de formar LGP.

En algunos casos se hacen largos listados de características y cualidades  que idealmente deben poseer los lideres, tales como ser carismáticos, visionarios, leales, optimistas, sinceros, perseverantes  etc., etc. Pero tal forma de presentar el liderazgo carece de utilidad práctica para la educación y formación de nuevos líderes, ya que se trata de juicios superficiales, parciales y simplistas sobre el comportamiento de los líderes.

Del Valle (2009)[1] señala tres enfoques de liderazgo: Conductual o de las características, con sus teorías de los rasgos, del comportamiento y de la red. Situacional o de contingencia, con su modelo de contingencia, la teoría situacional, trayectoria a la meta y la del líder participación. Emergentes, con sus teorías carismáticas y transformacionales.

Enfoque conductual.
El enfoque conductual trata de explicar el liderazgo mediante la búsqueda de rasgos o características que poseen los líderes efectivos. Se trata de las teorías sobre el “gran hombre”, del “hombre superior” o del “súper hombre”, del “genio”, del líder carismático. Sus principales teorías son:
La teoría de los rasgos, que examinan atributos de personalidad, intelectuales, sociales y fiscos tratando explicar lo que hacen, por qué actúan de uno u otro modo, los efectos de sus acciones en los seguidores y la organización.         
La teoría del comportamiento,    que estudia las conductas de los líderes que pueden actuar orientados a atender al empleado o por el contrario al puesto. De donde se derivan el liderazgo “autocrático” o centrado en el líder, el liderazgo “democrático” centrado en el grupo, y el liderazgo "laissez-faire", liderazgo ausente o no directivo. Otra forma de presentarla es la mención del liderazgo orientado a los empleados o a la tarea o producción.
La teoría de la red, creada para medir las dos dimensiones de la teoría conductual del liderazgo: “preocupación por la gente”  y “preocupación por la producción”. Los estudios conductuales mostraron que los líderes no son innatos, por el contrario hay conductas que pueden ser cultivadas para formar a los líderes, pero estas no explicaron cómo afectan ciertas situaciones al desempeño del liderazgo.
Enfoque situacional.
El enfoque situacional, sostiene que diferentes patrones de conductas pueden ser efectivos en diferentes situaciones donde se debe liderar. En tal sentido, se conocen la teoría de las metas, la teoría de los sustitutos del liderazgo, la teoría de la decisión normativa, la teoría de los rasgos cognitivos y la teoría de la interacción líder- ambiente – seguidor como los más resaltantes. Pero Lupano y Castro (s/f), señalan que  estas teorías situacionales, tienen la restricción de ser demasiado generales por lo que no han sido sometidas a pruebas científicas rigurosas.
La teoría del liderazgo situacional (TLS) sostiene que la efectividad de liderazgo depende de la capacidad del líder para diagnosticar las condiciones de la situación para responder a tales situaciones mediante una variedad adecuada de conductas. También se propuso la teoría de la trayectoria  a la meta,  que sostiene que el líder debe acompañar y apoyar a sus seguidores a que alcancen las metas propias y las organizacionales.  Y la teoría del líder-participación, tiene que ver con la calidad de la decisión tomada por el líder y con la aceptación de la decisión del líder por parte de los subordinados, derivándose cuatro estilos de liderazgo: Director, apoyador, participativo y orientado hacia los logros.
Enfoques emergentes.
Los enfoques emergentes estudian el liderazgo desde una perspectiva más actual, ética y moral, tal como los estudios del liderazgo carismático, liderazgo transaccional y el liderazgo transformacional. Según Lupano y Castro (s/f)[2] el liderazgo transaccional expresa una transacción entre el líder y los miembros del grupo, donde estos aceptan la influencia del primero siempre que éste les proporcione ciertas recompensas, los seguidores son motivados por promesas de recompensas o castigos. Pero el liderazgo transformacional (LT) estudiado sobre todo por Bass y Avolio (1985) siendo Bass su principal exponente, es uno de los enfoques más estudiados en la actualidad, ya que “ayuda al logro de un desempeño excepcional del líder como de los seguidores, cambiando y desarrollando la organización integralmente”.
En ese sentido se  resalta tres aspectos importantes del LT: Carisma, consideración individual y estimulación intelectual. Así los líderes transformacionales revitalizan la institución con nueva visión, actualizan la misión y promueven intercambios interinstitucionales, el  modelo transformacional trasciende a la transacción, pues motiva a los seguidores a dejar sus propios intereses en beneficio de los intereses del grupo, es contrario a la autopromoción, por el contrario manifiesta  valores de trascendencia y apertura al cambio, generando confianza, respeto y motivación para logros superiores. También permite  aprender sistemas de valores que son indicadores de cómo se comportarán los líderes a lo largo de su existencia como principales actores y efectores de los resultados que alcanzarán las instituciones.
Pero es sobre todo, es la dimensión moral del LT la que la hace diferente, pues la meta del LT es una relación de mutuo estímulo y elevación que convierte a los seguidores en líderes y a los líderes en agentes morales de transformación y renovación.
En tal sentido la enseñanza del LT entre los LGP puede ayudar a forjar la visión compartida, aprendizaje, innovación y logro de resultado en el discipulado de los miembros de los Grupos Pequeños, permitiendo su desarrollo integral gracias a énfasis en la creatividad, innovación, valores, y el aprendizaje continuo de los miembros y nuevos líderes de GP.
Existen modelos aun no sustentados cabalmente, tal el caso del  liderazgo siervo propuesto por Greenleaf (1970)[3], y el modelo espiritual propuesto por Dodd (2005)[4].  Pero este estudio sobre teorías de liderazgo permite percibir que antes de elegir y asignar tareas de liderazgo a los LGP en la IASD, primero es preciso conocer sus características y entrenarlos con una estrategia y metodología adecuadas para su labor de naturaleza espiritual


Por

Dr. Rubén Jaimes Zubieta
Catedrático de la Universidad Peruana Unión




[1] Del Valle, R. (2009). Teorías de liderazgo. Versión electrónica, recuperado en marzo del 2009.
[2] Castro, A. y Casullo, M. (2005). Análisis del cambio en los estilos de liderazgo de un grupo de estudiantes militares. Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires RIDEP · 19 (1)
[3] Greenleaf, R. (1977). Servant Leadership: A journey into the nature of legitimate power and greatness. New York: Paulist Press.
[4] Dodd J. Briam. (2005) Liderazgo con Poder. Editorial Patmos. Miami.

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